26 de mayo. CNX 2012. Impresiones

El sábado 26 de mayo 3 de los renegados más curiosos no pudieron evitar quitarse el gusanillo para rodar con sus equipos por la edición de la CNX 2012 en pleno pulmón del parque de los Alcornocales.

El reto era cuanto menos atrayente, pues eran 70 Kms con un desnivel acumulado de 2000 m, realmente es lo que nos gustaba, queríamos conseguir "nuestro pase hacia el cielo", pues como era de esperar había que subir por una buena autopista rodeada de unos increíbles parajes que nos arropaba con helechos y alcornoques, la cual acompañada de una impresionante organización, resultaba más ameno salir del infierno y llegar frescos al cielo.

Desde la misma salida la adrenalina empezaba con la cuenta atrás compartiendo hueco con 500 participantes, una ves empezado , la ruta discurría por asfalto rodando unos cuanto kilómetros hasta desviarnos por pistas, ya allí empezaba lo bueno en lo que se tenía que tomar con calma la bajada de los participantes, todo ello debido a que se empezaba por unas fuertes subidas que requerían fuerza y técnica, si a ello le sumamos el número de participantes era un pequeño colapso, por lo tanto había que aprovechar para montarte lo antes posible en la bicicleta y poder adelantar montado en ella, y así poder abrir huecos.

Referente a la señalización era perfecta, todo momento indicaba el camino a seguir, además de las bajadas peligrosas, incluso nos llamó la atención el cartel del tío de mazo, el cual te amenazaba después de subir un duro cortafuego, cada vez que nos encontrábamos un puesto de avituallamiento era señal de que después de este, venían más cuestas dignas de respetar, en las cuales era habitual pasado los 40 Kilómetros ver la cara de sufrimiento de los demás, gente subiendo a pie, etc.

La simpatía y la buena labor rebosaba en cada uno de estos puestos de avituallamiento, en los que gracias a ellos a uno de nuestros compañeros le sirvió de mucho pues iba con las piernas cargadas, el cual en ningún momento pensaba quedarse en el intento de conseguir su pase hacia el cielo, por lo que decidimos seguir juntos por la ruta larga para poder llegar a la gloria con más ganas que nunca.

Solo nos separamos en los últimos 10 Kilómetros en el que el mono de más de un animal de bellota le hacía de pegar el tirón hacia adelante para llegar a la meta como una moto, dándole animo a los demás que se encontraba por el camino.

A modo de resumen fue una dura ruta digna de repetir para todo aquel que prueba, pues a todo aquel que le guste el mundo de la MTB sabe que el dolor se pasa, pero el recuerdo guarda muy buenos momentos de aquellos preciosos parajes, buen rollo entre los participantes y el agrado de aquella organización en la que nos se le olvidó ni un solo detalle para que todos pudieran coger de alguma manera o de otra su particular autopista hacia el cielo.

Avisamos de que para la próxima edición, el grupo de los renegados del MTB asistirá con más renegados caldeados por aquellos que ya fueron y probaron, habiendo visto la CNX con diverss percepciones pero todas positivas: