sábado 30 de junio. Piedras Recias-Altabacales altos-Altabacales bajos charca de las nutrias.

Queridos amigos,

De acuerdo a nuestros planes y como renegados que somos, realizamos la ruta que propusimos , pero con una serie de pequeñas modificaciones, la ruta transcurrió así:
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Quedamos a las 08:00 siendo este el nuevo horario de verano para poder esquivar en la medida de lo posible el azote de la calor veraniega que nos viene rozando desde hace semanas,quien dice las 08:00 dice las 08:15, no nos debemos olvidar de ese espíritu renegado que tiene le grupo, haciendo que los más puntales, lo cuales riñen a los impuntuales, lleguen también incluso con más retraso que los otros.

Una vez reunidos y tras unas pequeñas burlas por las impuntuales apariciones, no dispusimos a lomos de nuestras monturas para dirigirnos hacia el río de la cala, donde pedaleábamos alegremente pensando en nuestra triunfal escalada por piedras recias, hasta el momento no paraba de reinar la serenidad en el grupo lo cual indicaba que este conjunto avanzaba a modo ecotec, guardando y atesorando sus energías estrategicamente, algo raro en nosotros, pues la estrategia con ellos nunca sale bien, aquí cada uno te pega unos tirones cuando menos te lo imaginas, haciendo que la rodada en conjunto se acelere por momentos.

Bien, nuestros fríos músculos empezaron a entrar en calor a nuestra entrada en el camino de anastasia, siendo un carril de superficie asfaltada que nos llevaría hacia nuestro sufrido destino de piedras recias, esta te acoge con una empinada cuesta de izquierdas, que hace cambiar tu humor de forma radical, puedes pasar de la felicidad a pegarle un bocado en el brazo de tu colega de pedalada más querido.

Una vez ascendido por esta comenzamos de nuevo a descender para desviarnos a la izquierda y comenzar con piedras recias, o mejor dicho "pedradas tiesas", dado que al final lo más probable es que el tío del mazo te dejara tieso al llegar arriba. Hicimos una breve parada en el cruce de arriba para esperar a los más rezagados, posteriormente y una vez reagrupados cogimos hacia la izquierda con destino hacia el puerto de las Palmas., el ritmo del grupo iba al unísono sin propasarnos demasiados en cuanto al desgaste de fuerza en la pedalada, todo ello hasta salir al Km 7 de la carretera de los Reales.

Llegados al asfalto Raúl y Jose encendieron sus reactores para subir a tope por la carretera hasta llegar al cruce de los altabacales altos, tanto era así que este último adelantaba hasta un ciclista de carretera, desbordado por la sed de llegar pronto a las charcas de las nutrias, pues el ritmo de estos renegados se incrementaba a medida que pasaban los kilómetros, quitando alguno que otro que estaba tocadillo.

La primera parada forzosa la hicimos justo a la entrada del cerro del duende o como lo conocen algunos enlace de los altabacales, donde nuestro compañero Mario reventó su cámara ( eso por no tener tubeless como diría Alex) fruto de una feroz bajada que realizaba junto con Raúl, nuestro hombre sin frenos en las bajadas. Una vez arreglado este pinchazo seguimos hacia adelante donde nos sorprendió Jose y Raúl los cuales estaban uno en la curva con la cámara preparada y el otro encima de un árbol como si de un Koala con cámara se tratara.

Por fin y una vez bajado por los Altabacales, realizamos un rápido descenso por el Nicola y la charca de las nutrias, fruto de que la humedad cada vez estaba más cerca, era algo parecido a lo  que le pasaba a los tiburones con la sangre, a medida que olíamos , nos volvíamos cada vez más agresivos en la bajada hasta llegar a nuestro preciado destino, donde aprovechamos magnamente de unos refrescantes chapuzones que nos llevó algo más de una hora, tal era así que nos costó abandonar las charcas de las nutrias.

El convencimiento llegó cuando uno de nuestros compañeros alzó su voz a modo de espartano gritando ¡Cerveza! Si bien en todo momento nuestra presencia en estos baños era notable por nuestros gritos y bromas en alta voz, donde era raro que hubiera signos de fauna a 3 kilómetros a la redonda, pues la naturaleza se veía truncada momentáneamente por las broma y disfrute de los Renegados del MTB.

Seguidamente y una vez saltado encima de nuestras monturas, nuestras BTT nos llevaron directamente hacia esa esperada cerveza que tanto ansiamos ruta tras ruta,como siempre amenizado por la buena compañía de estos Renegados del MTB.